Primavera....

El ciclo de las estaciones es más explosivo en primavera,

es un grito que sale de la tierra, rebota en el cielo y llega al mar...

Se acerca, lo estoy notando en el ambiente que imagino, en ese paisaje que forma parte de mis sueños, siento como mi primavera lucha por hacerse un hueco en el invierno que no acaba de irse y que da coletazos de furia para demostrar que es el rey de las estaciones, el más duro, el más fuerte.

La ciudad aparece con el cielo taponado, hay nubes que quieren guardar su sitio, ocupar su lugar ganado desde el otoño, nubes que tapan mi sol y el sol del resto de los que me rodean, nubes cargadas de polvo que probablemente mañana descargarán sus fluidos sobre mi, sobre el árbol del patio interior y llenarán de gotas los cristales de mis ventanas.

Pero ya siento que cuando hayan desaparecido veré el arco iris, sólo veré un trocito pero lo imaginaré completo, y los días empezarán a ser más largos, y la luz me acompañará.

Cuando el primer calor abra sus compuertas, habrá algo dentro de mi que empezará a cambiar....lo recuerdo de otras primaveras, vagamente....

Me recuerdo al volante, conduciendo despacio, las ventanas abiertas, la música creando ambiente, los semáforos llenos de esperas, de miradas curiosas por los retrovisores, de sonrisas furtivas, .... será fruto de la estación que más nos llena, las que nos hace sentir más y mejor, la que desentumece los huesos y nos abre los poros....sensibilidad a flor de piel.....

Iremos al campo, quiero pintar la luz, fuera de las calles grises de la ciudad, quiero sentir el color golpeando mi retina, quiero sentir la brisa de Amboise moviendo mi pelo, enredándolo y formando un código de barras sobre el cielo.

Quiero sentir la llegada de la primavera, la espero impaciente, nerviosa, alterada, pero si no llega iremos a buscarla allí.... a la casa junto al Loira.

Keryann está allí, para abrir las ventanas, para hacer un hueco al sol. Mi caballete está preparado, nuevos colores me esperan, sólo tengo que esperar un poco y llegar...