Bajo un fina lluvia de invierno, el sacerdote y unos pocos amigos dieron su último adiós a Bérénice.
La noticia de su fallecimiento ocupó pocas lineas en el periódico local, pero aunque hubiera estado en portada, nadie más se hubiera desplazado al pequeño cementerio de la Ville d'hiver.
Bérénice nació,vivió y se dejó vencer por su enfermedad en Arcachon, sur de Francia, a cuyo clima se sentía más que unida, totalmente atada. Dependía de su aire puro con aromas de pino, dependía de su clima suave, de los balnearios y de los servicios médicos para entre todos, luchar contra el vacío que la tuberculosis estaba dejando en sus pulmones.
Hoy, casi 90 años después, los actuales propietarios de la casa (que ahora es un hotel) me han llamado para luchar contra una plaga escondida que amenaza la madera.
Me alojo en la ultima planta y tan apenas me he cruzado con los residentes fijos que ocupan el primer piso. No oigo sus ruidos, ni sus pasos en las tablas sueltas, parecen mudos, como si estuvieran muertos pero nadie les hubiera informado de la nueva situación.
Llevo horas encerrado en mi suite con un diario, su diario, el diario de una tal Bérénice que como un secreto tesoro apareció escondido en una falsa pared de la torre, punto más elevado de esta maravillosa casa.
Creo que me quedaré en Arcachon durante algún tiempo, voy a aceptar el trabajo de recuperación de la Villa Coulaine, quiero conocer el resto de las Villes d' hiver y sobre todo, tengo que visitar un pequeño cementerio rodeado de pinos...
4 comentarios:
Quédate en Arcachon y sigue escuchando los pasos de Bérénice...paséate por mi casa virtual y escucharás una hermosa melodía que si bien se titula Maya's Lullaby econtraría acomodo sin dificultad en tu exquisito escrito con el nuevo título de "Bérénice Lullaby"...Tiene la carga de nostálgica belleza que rodea la "Villa Coulaine". Si uno escucha con atención oirá las pisadas múltiples de presencias pasadas, esas presencias que las paredes parecen echar de menos, porque hay gente que deja un rastro eterno allí donde pasan...
Maya's Lullaby....
Absolutamente perfecta y adecuada, es sin duda la melodia que habita los huecos oscuros de la Ville Coulaine.
Un piano, en el fondo de salón, escupe notas que parten de los dedos largos y afilados de Madame Pereire, la madre de Bérénice.
Una canción de cuna que interpreta día tras día, y que con el tiempo ha impregnado las paredes como un barniz...
Bérénice Lullaby :-)
Hola
me encanto tu espacio
te invito a que conozcas Glamour Performance
un beso especial
ts
"La inspiración", te llega por todos lados....Grato texto, y si, rodeate de mas historia que contar...
Muchos Saludos
MariaJose
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